Con la misión de expandir la Palabra a toda criatura el dúo Víctor y Patricia nos presenta su álbum musical compuesto por un Intro y 8 temas llenos del amor de Dios.
Un trabajo realizado como para el Señor, con gran esfuerzo y el firme propósito de llevar el mensaje de la palabra de Dios a más lugares y países donde necesitan un mensaje de salvación, como nos enseña la Palabra en Marcos 16:15 RV60: “Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura”.
Dios prepara la venida de su Hijo y nosotros vemos la necesidad que hay en el mundo, las calles, los países, los pueblos, de salir a predicar, a buscar las almas que necesitan de Dios, para que crean en Jesús como Señor y Salvador.
Víctor y Patricia nos recuerdan la escritura que hay un solo mediador entre Dios y los hombres. Y es Jesucristo (1 Tim. 2:5-6) y que el dio su vida en la cruz para Salvar al mundo (Juan 3:16).
Nos animan a perseverar porque solo Dios tiene el control de todo lo que nos pase en nuestras vidas y con Él venceremos todas las adversidades y dificultades que podamos tener.
Los planes colocados en las manos del Señor en este tiempo se centran en dar a conocer el mensaje y se siga expandiendo a diferentes lugares y países que necesiten una palabra de amor y aliento, dispuestos a ir a donde Dios los llame y sea el Señor abriendo puertas.
Puedes escuchar las alabanzas y adoraciones de este maravilloso álbum en todas sus redes sociales.
Acerca de Víctor Manuel Martínez Rodríguez y Patricia Mariano
Residen en Santo Domingo, República Dominicana, país que los vio nacer. Conforman una familia felizmente casados con un retoño: Víctor José de 5 años/de edad.
Víctor es publicista de profesión y Patricia Maestra de Educación. Fieles servidores en la Iglesia Evangélica Cristo Vive Inc, donde residen.
Nos comparten el siguiente testimonio en sus vidas, una experiencia sobre la enfermedad del covid 19. “Mi esposa y yo contrajimos el virus al inicio de la pandemia, mi esposa duró 15 días, pero yo duré 4 meses con el virus, estaba sufriendo la secuela de coagular la sangre, tenía que estar tomando anticoagulantes para no tener cualquier paro. Y una noche orando el Señor me puso el sentir, que dónde estaba mi fe. Que no tomara más pastillas y que pusiera mi fe en Él y a los minutos se me acerca mi esposa, me pone la mano en el hombro y me dijo: te dice Dios que pares los medicamentos que Dios te sanó. Y Dios hizo el milagro en mí. Mil gracias a Dios por tener misericordia de mí, y darme la oportunidad de seguir llevando su Palabra.
